El portavoz del grupo municipal de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Granada, Manuel Olivares, ha reclamado de nuevo al equipo de gobierno “medidas urgentes” ante la crisis actual en las plantillas de bomberos y policía local, insistiendo así en la necesidad de solucionar un problema que “está llegando a situaciones críticas”.
“Somos conscientes de que ambas plantillas se encuentran bajo mínimos y con una estructura que encarece notablemente los servicios que prestan”, ha explicado Olivares tras varias reuniones con los sindicatos de ambos cuerpos, quienes les han puesto de manifiesto la necesidad de “agilizar los procesos de promoción para cubrir plazos de mandos”, y que podrían llegar a suponer un ahorro considerable en la reducción de horas extras, ya que con un presupuesto de 800.000 euros alcanzan actualmente 2 millones de euros.
“Se trata claramente de un problema estructural que debe ser atajado con urgencia, no únicamente por el coste económico que supone, sino también por las sobrecargas de trabajo”, ha reivindicado el portavoz de Cs, quien ha pedido igualmente la puesta en marcha de forma inmediata de los procesos selectivos para los nuevos ingresos debido a la elevada edad media de las plantillas. “Los servicios que prestan bomberos y policías son fundamentales, ya que garantizan nuestra seguridad e integridad”, ha expuesto Olivares, quien ha remarcado la necesidad de alcanzar en una ciudad como Granada “una estructura que preste un servicio óptimo y adecuado”.
Olivares también se ha referido a la necesidad de trabajar de forma consensuada todos los grupos del Consistorio para trabajar en el capítulo de personal y poder amortizar unas plazas en áreas sobredimensionadas para reformular y adaptar las más sobrecargadas. “Se trata no solo de mejorar la operatividad y funcionalidad, sino también de ahorrar”, ha apuntado el portavoz, quien considera “imprescindible” llevar a cabo una reestructuración y optimización de los recursos. En este sentido, ha aseverado que en ningún momento su partido se cansará de pedir una auditoría del Ayuntamiento no solo a nivel económico, sino también de gestión, y que traslade un conocimiento claro de cómo están estructuradas las áreas para adaptarlas a la demanda de la ciudad, optimizarlas sin sobrecargarlas e ir amortizando aquellas que no sean necesarias “desde la transparencia y evitando rencillas y vendettas internas”.
