La agrupación de Ciudadanos Salobreña ha criticado las “malas acciones individualistas” llevadas a cabo por el equipo de gobierno del Ayuntamiento del municipio en sus últimas actuaciones relacionadas con la urbanización Salomar 2000 y el paseo marítimo. En concreto, el portavoz de C’s Salobreña, Plácido Leyva, ha demandado explicaciones por el derribo del muro de la piscina y la destrucción de la pista de tenis de la urbanización amparándose en un acuerdo ilegal de permuta de terreno con los vecinos que se ha topado con el decreto del juez de paralización de las obras, así como por la decisión de expropiación a Salomar 2000 de casi 1.100 metros cuadrados lindantes al paseo marítimo al no poder ejecutar la permuta de los terrenos.
“No queremos que la corporación local mienta a los vecinos y haga caso omiso a sus compromisos. Su pésima actuación en el conflicto de Salomar 2000, invadiendo una propiedad privada sin contar con una resolución administrativa que la amparase, puede tener graves consecuencias para todos los habitantes de un municipio que no es millonario”, ha alertado Leyva, quien ha explicado que si los vecinos de la urbanización ganan la demanda y todo se debe reponer a su estado originario, el coste de los casi 67.000 euros de la expropiación será para todos los salobreñeros: “Eso es malversar el dinero de los vecinos y se puede traducir en una subida de impuestos para todos, al igual que hizo el equipo de gobierno de la anterior legislatura con la desproporcionada subida del IBI”.
El portavoz de Ciudadanos ha relatado que el acuerdo para realizar la permuta se efectuó el pasado 15 de junio y se suscribió entre el entonces presidente de la comunidad, que no contaba con competencias para firmarlo, y el teniente de alcalde y concejal de Urbanismo en representación de la alcaldesa. En este proceso, según denuncia Ciudadanos, se han cometido numerosas irregularidades y se han obviado documentos tan importantes como el expediente de permuta (requiere de un decreto de alcaldía, informes de valoración, un informe del Consultivo y la aprobación en el pleno del Ayuntamiento) o la ratificación de la junta de vecinos, ya que el presidente por sí mismo no tenía legitimidad para decidir algo así sin el apoyo de una mayoría de vecinos en asamblea.
El portavoz de Ciudadanos ha solicitado a la corporación local, que “abandera la transparencia y gestión responsable de los recursos del Ayuntamiento”, que facilite sin más dilación la partida presupuestaria por la cual se concede a la empresa la potestad para demoler el muro y poner la valla provisional, y que se trata de la misma empresa que está trabajando para el Servicio Provincial de Costas de Granada en la reparación de los daños por el temporal del 2015.
“Entendemos que se ha vuelto hacer una chapuza más por parte del Ayuntamiento y que, si no se llega a un consenso los vecinos de Salobreña 2000, todos los ciudadanos vamos a tener que hacer frente a los gastos”, ha lamentado Leyva. Asimismo, ha asegurado que espera que los políticos tengan “altura de miras” y lleguen a un “entendimiento lo más rápido posible” con los propietarios de la urbanización a fin de evitar más gasto de dinero y el deterioro de la imagen del municipio.
“En Ciudadanos estamos a favor de todo impulso al desarrollo urbanístico y consideramos que, si viene acompañado del arreglo y mejora del paseo marítimo y de todas las instalaciones y vías, puede llegar a ser una buena acción”, ha especificado Leyva, quien ha calificado de “incomprensible” que el equipo de gobierno tenga abandonadas zonas tan destacadas como el espacio que une el Paseo de las Flores con el Gambullón, la reconstrucción del arco de entrada al paseo al Paseo de las Flores, el vial de la playa (con señalizaciones que apenas se identifican, escasa o nula iluminación y un gran abandono de las zonas verdes) o el problema de las inundaciones, mientras que comienzan con nuevos proyectos.
“Visto el estado tan lamentable de algunos proyectos puntuales del municipio, tememos que se terminen por abandonar. Creemos que las cuestiones de esta índole se han de pensar muy bien y consensuar antes de seguir ejecutando proyectos que nos merman las arcas y crean malestar entre los vecinos”, ha añadido Leyva, quien considera que en lo referente a Salomar 2000 “no se ha actuado con rigor” y que el resultado ha sido “un mal uso de las arcas públicas de Salobreña”.
