“No queremos una España de rojos y azules, de buenos y malos, sino dar respuesta desde la sensatez a los problemas de la gente”. Así ha resumido el objetivo de Ciudadanos Luis Salvador, candidato al Congreso de Diputados por Granada, durante la presentación en la facultad de Ciencias Políticas del libro Diez céntimos de libertad, del profesor Antonio Robles. Un libro que ha definido como “una joya de la ciencia política moderna, que describe la realidad de la política actual, la analiza, aporta soluciones y permite comprender lo que estamos haciendo los partidos emergentes”.

Luis Salvador entiende que de cara al 20-D, hay que descartar las opciones de PP y PSOE “porque ninguno ha hecho nada por ilusionar” y aunque ha reconocido que Ciudadanos y Podemos, que representan la alternativa, “coinciden en el diagnóstico”, ha matizado que les distingue el modelo social que proponen. “Podemos va al de lucha de los que no tienen contra los que sí, nosotros abogamos por una segunda transición, por reformas profundas y urgentes”.

El también portavoz del grupo municipal de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Granada ha incidido en que su partido ha permitido la gobernabilidad en comunidades autónomas y ciudades, pero “no lo ha hecho como se hacía antes, que era adquiriendo cuotas de poder, alcanzando mejor sueldo o contratando a personal de libre designación”. Ciudadanos ha optado por la vía de “condicionar a quienes gobiernan con acuerdos como el firmado en la Junta de Andalucía, setenta puntos para mejorar la vida de los andaluces. O como el alcanzado en Granada, cincuenta puntos que el PP debe cumplir porque son buenos para los granadinos“.

En ese sentido, Luis Salvador ha dejado claro que su partido no apoyará en Granada propuestas con los ojos cerrados, como las ordenanzas fiscales o la subida del IBI, y también se ha referido a la concejal de Urbanismo, Isabel Nieto, de quien Ciudadanos ha pedido su dimisión “por coherencia, porque en mi partido hemos actuado así y porque todo lo que ha pasado en este país ha sido tan fuerte que teníamos que poner un límite y ése es el de una imputación por la presunta comisión de un delito de corrupción”.

 

Luis Salvador, durante su intervención