El concejal del grupo municipal de Ciudadanos Manuel Olivares ha instado al Ayuntamiento a que ejerza presión sobre la Junta de Andalucía para que los escolares de los centros concertados de las zonas de exclusión social de Granada reciban “inmediatamente” los servicios de comedor. “No podemos permitir que la falta de sensibilidad y de previsión deje a tantos niños desamparados en zonas altamente desfavorecidas”, ha resaltado Olivares, quien ha explicado que los comedores en estas zonas sirven también como “herramienta tanto de desarrollo social como cultural”.
Olivares ha señalado que el origen de esta situación se remonta a noviembre de 2014, fecha en la que se cambió la orden que regula el uso de los comedores escolares. La previa Ley de Solidaridad hablaba de ayudas de compensación educativa en centros sostenidos con fondos públicos en zonas de exclusión social. Sin embargo, ha lamentado el concejal, la actual Ley de Comedores que regula los servicios complementarios solo habla expresamente de centros públicos, lo que dejó a esos centros concertados sin la posibilidad de hacer frente al pago de las facturas contraídas con la empresa de catering.
El concejal del grupo municipal de Ciudadanos ha calificado como “grave” la situación y ha pedido el “rápido cambio de modelo legal” para que el servicio de comedores en estos centros vuelva a tener entidad pública. Para ello ha apelado al artículo 3 de la Ley de Educación de Andalucía (LEA), que defiende una enseñanza pública de calidad donde también tengan cabida los centros concertados.
