“Granada no puede ser el desguace al que vayan a parar los autobuses viejos que otras capitales andaluzas no quieren”. Así lo ha aseverado esta mañana en rueda de prensa el portavoz del grupo municipal de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Granada, Manuel Olivares, quien ha criticado la falta de gestión, fiscalización y de control que está ejerciendo el equipo de gobierno sobre el estado de la flota de vehículos de Rober, del que ya se han trasladado reiteradamente sus quejas los usuarios y las organizaciones sindicales.
“Los caprichos del nuevo plan de movilidad de Paco Cuenca ya nos han costado 4 millones de euros extra a todos los granadinos y lo único que hemos conseguido a cambio ha sido un peor servicio, más costes y más contaminación en la ciudad. Ahora, además, completan la flota deficiente de vehículos con los que cuenta Granada con dos autobuses viejos descartados de Sevilla en lugar de apostar por una flota moderna y sostenible, que es el objetivo que debemos marcarnos”, ha señalado Olivares.
En concreto, ha explicado, el equipo de gobierno está desoyendo tanto las quejas vecinales sobre la limpieza de los coches y su antigüedad, además de los retrasos en la frecuencia de paso, como el informe que han elaborado al detalle las organizaciones sindicales que revela el mal estado de los neumáticos en 6 vehículos, rampas que no funcionan en 47, problemas con la climatización en 22, falta de botiquín en 33, el mal estado de la goma del pedal de freno en 26 y problemas con la seguridad de las trampillas en 102, entre otros. “A ningún granadino se le dejaría circular con un vehículo que no cumple y sería sancionado por ello y, sin embargo, a la empresa concesionaria del transporte público sí se le permite”, ha apostillado.
“Si queremos buscar realmente la eficiencia debemos exigir a Rober un cumplimiento riguroso del pliego de contratación y establecer sanciones si se dan incumplimientos”, ha indicado el portavoz municipal de Cs, quien ha recordado que su grupo llevó al pleno dos iniciativas precisamente para favorecer esta fiscalización de los servicios que se prestan a la ciudadanía: por un lado, hacer público el sistema de ayuda a la explotación con la geolocalización de los autobuses en circulación abierta a la consulta de los usuarios y, por otro lado, ejercer un control y seguimiento de todas las contrataciones públicas con las que cuenta este Consistorio.
Olivares ha insistido en la importancia de abordar la movilidad en la ciudad desde el consenso a partir de todo lo que ya se avanzó con las comparecencias de decenas de colectivos y expertos en la materia en el Observatorio de Movilidad y “afrontando un proyecto de futuro cuya clave esté en aumentar el número de viajeros y en conseguir que los diferentes medios no compitan entre sí, sino que sean realmente complementarios buscando la máxima eficiencia del sistema”.
“Ni acertó el PP con su gestión en 1997 al ampliar la amortización de los autobuses de 7 a 10 años para compensar parte de la deuda que tenía contraída con Rober ni ha acertado el PSOE con su gestión actual, que no se preocupa por el cumplimiento de los pliegos de los contratos y mira hacia otro lado. Una buena movilidad no puede depender de ideologías sino de una gestión que busque siempre los mejores resultados y el mejor servicio para los ciudadanos, voten a quien voten”, ha concluido.