El portavoz del grupo municipal de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Granada, Manuel Olivares, ha criticado con firmeza el mal uso y control de la democracia que ejerce el alcalde de la ciudad, Paco Cuenca, cuando se trata de representar los intereses generales de la ciudad. Olivares ha puesto como ejemplo la carta que el alcalde remitió hace unos días al ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, para abordar la necesaria llegada del AVE a la ciudad; “un tema común y sobre el que todos los grupos comparten la misma indignación pero que el alcalde intenta abanderar con malas formas mediante escritos personalistas en primera persona, potenciando la confrontación y consiguiendo tan solo romper los puentes de entendimiento y paralizar los logros que se habían conseguido desde el consenso”.
“Durante la etapa del PP al frente del equipo de gobierno Cs consiguió que el alcalde consensuase las cartas y la toma de decisiones con el resto de la oposición. Hoy tenemos un alcalde que ha sustituido el ‘nosotros’ del auténtico diálogo por el ‘yo’ unilateral e imperativo, coartando cualquier atisbo de participación de los partidos políticos y, con ello, cualquier participación de los granadinos”, ha señalado el portavoz de Cs, quien ha apuntado a que la política del futuro no pasa por la toma aislada de decisiones, sino por la creación de auténticas mayorías que aglutinen a todos partidos en torno a proyectos realmente positivos para una ciudad.
Olivares ha puesto de manifiesto el abuso que se está haciendo del reglamento municipal para imponer criterios que rompen la garantía ciudadana de las mayorías representativas: “Hay que trabajar para solucionar los problemas, no para abanderarlos y obstaculizar la solución buscando el enfrentamiento”.
Asimismo, ha reivindicado la necesidad de abordar los principales temas que afectan a la ciudad “desde una visión estratégica que rompa el ciclo de cuatro años de un mandato” y ha recordado que si Paco Cuenca se sintió legitimado cuando por circunstancias excepcionales fue investido alcalde por el voto a favor de 16 concejales de distinto signo, “hoy está incumpliendo lo firmado y deslegitimado por el mismo número de concejales”: “Un alcalde tiene el deber de estar al servicio de los ciudadanos y defender los intereses de los granadinos”.
