“Los errores del alcalde no pueden separarnos del objetivo de que el AVE llegue ya”. Así lo ha asegurado esta mañana el portavoz provincial de Ciudadanos y diputado en el Congreso por Granada, Luis Salvador, acerca del documento “sin consensuar y sin consultar a los partidos y al resto de instituciones” que el alcalde, Paco Cuenca, ha presentado al Ministerio de Fomento y a la opinión pública como propuesta del Ayuntamiento de Granada para soterramiento del AVE.

Salvador ha recordado que la prioridad número uno es que el AVE llegue ya a Granada y ha manifestado que, tras los distintos titubeos del alcalde y algunos grupos, es esencial “mantener el respeto al consenso” que ya existe en la declaración institucional que todos los grupos municipales del Ayuntamiento suscribieron hace dos años y en el Proyecto No de Ley (PNL) que se aprobó en el Congreso de los Diputados y “exigir máxima diligencia” para cumplir con los plazos dados por el Ministerio de Fomento para la puesta en marcha del servicio en febrero de 2018.

“Reclamar la llegada del AVE ya a Granada es el marco imprescindible de la propuesta del convenio. No sería bueno que el Ministerio utilizase los desencuentros para justificar un retraso de la puesta en marcha del servicio”, ha apuntado el diputado, quien también ha valorado la reunión que Cuenca mantuvo ayer con la rectora de la Universidad de Granada (UGR), Pilar Aranda.

“Tras las últimas informaciones, que demuestran que el alcalde no había hablado previamente con la rectora, no salimos de nuestro asombro. El alcalde ha vendido una propuesta de soterramiento al Ministerio de Fomento en la que no ha contado con la Universidad ni tampoco con ningún partido, algo normal en un alcalde para el que la palabra diálogo es que todos asumamos directamente lo que a él se le ocurra y para el que el consenso significa que nadie le lleve la contraria”, ha resaltado Salvador, quien ha manifestado su sorpresa de que el alcalde haya dispuesto de terrenos que forman parte del patrimonio de la UGR, como el campo de rugby o los comedores universitarios, sin consultar al menos con la rectora. “Cuando se hacen así las cosas sucede lo que ha pasado, que nos encontramos con una propuesta que no puede contar con los terrenos de la Universidad, ya que la rectora se los ha llegado a negar hasta en tres ocasiones”, ha añadido el diputado, quien ha lamentado que Cuenca haya dicho que el proyecto, uno de los más importantes para Granada para los próximos veinte años, “esté sujeto ahora a matices”, sobre todo teniendo en cuenta que ya ha sido remitido a Fomento.

“Desde Ciudadanos nos preguntamos si es serio presentar a la opinión pública granadina un proyecto de esta magnitud sin haberlo dialogado previamente con el resto de partidos políticos e instituciones de la provincia. ¿Podemos considerar como un ‘simple matiz’ el hecho de que la Universidad se rebele públicamente al hecho de que el alcalde de un simple plumazo cambie de sitio el histórico campo de rugby y los comedores universitarios? ¿Es serio que enviemos esta propuesta elaborada con los déficits que ya se han comentado al Ministerio de Fomento? Y eso, dando por bueno que el alcalde garantice que se van a vender las 1.900 viviendas que contempla el proyecto cuando no ha sido capaz de vender los 40 pisos de viviendas protegidas Apache ni después de bajar su precio”, se ha preguntado Salvador.

El diputado ha argumentado que el alcalde es “un especialista en vender humo” y ha puesto como ejemplo lo que hizo en su día creando expectativas de que Granada podía convertirse en la sede de la Agencia del Medicamento: “Desde Ciudadanos le dijimos personalmente al alcalde: Paco, sabes que ese proyecto es imposible para Granada y solo vas a generar frustración, por mucho que te sirva a ti políticamente”.

Salvador ha señalado que si el alcalde quiere que se le tome en serio en esta ciudad es imprescindible que “renuncie a personalismos y decisiones propias y opte por el diálogo y la búsqueda de acuerdos con el resto de los partidos en lugar de dar por supuesto que todas las instituciones, gobierne o no en ellas, deben aceptar sin rechistar todo lo que a él se le ocurra”.