El concejal del grupo municipal de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Granada Raúl Fernández ha reivindicado la necesidad de poner en marcha desde las instituciones iniciativas que permitan promover la inclusión social de las personas con trastorno del espectro del autismo (TEA) en toda la provincia. El edil ha avanzado así las propuestas que su grupo llevará a los próximos plenos del Consistorio y de la Diputación Provincial dirigidas a facilitar el acceso de las personas con TEA a una inclusión real para alcanzar “un futuro digno y abierto a las oportunidades” y a concienciar a toda la sociedad sobre este tipo de trastorno.

“Desde las instituciones tenemos la obligación moral de reafirmar nuestro total compromiso con los derechos y el bienestar de las personas con cualquier tipo de trastorno o discapacidad”, ha aseverado Fernández, quien ha resaltado la necesidad de promover mejoras en la educación pública para poder responder a sus necesidades, también mediante terapias de intervención temprana y apoyo a las familias, además de favorecer políticas de inclusión que creen puestos de trabajo adecuados a sus capacidades.

El concejal ha abogado por el “estudio de la implantación del Sistema Aumentativo y Alternativo de Comunicación (SAAC) a través de símbolos y pictogramas” colocados en espacios y edificios públicos, mobiliario urbano, zonas de recreo públicas, comercios y empresas de la capital para permitir que las personas no verbales puedan comunicarse con su entorno más próximo, siempre contando con el asesoramiento de profesionales y de las asociaciones. Asimismo, ha defendido la necesidad de instar a la implantación de este sistema en todos los edificios públicos de Granada dependientes de otras administraciones, fundaciones o entidades, con especial atención a los centros escolares y sus dependencias para “promover una escuela más inclusiva”.

Junto a esto, Fernández ha pedido que el Ayuntamiento de Granada, a la hora de conceder subvenciones a asociaciones, tenga en cuenta el hecho de que la gran mayoría de personas autistas, en torno al 80%, son niños y hombres, siendo muy baja su incidencia en niñas y mujeres, por lo que ha solicitado que se establezca en las bases de la concesión de subvenciones una excepción en materia de paridad: “En el caso del autismo, es imposible que los centros acojan el mismo número de hombres que de mujeres por la propia naturaleza de la enfermedad”.